El Carnaval de Bielsa es el más conocido de la provincia de Huesca. A la zona se acercan cada año miles de personas para disfrutar de una de las tradiciones más arraigadas. Todos los que quieran disfrutar de la flora y la fauna del valle pueden hacerlo a través de varias rutas senderistas.
BIELSA Y EMBALSE DE PINETA
Subimos hasta la parte alta del municipio de Bielsa y, desde allí, cogemos el PR que sigue de forma aproximada el camino de herradura que unía esta localidad con Javierre. Desde Javierre, ascendemos por el oeste hasta la presa de Pineta, cruzándola por la coronación de su dique de cierre. Cogeremos otro PR con un recorrido similar a un canal de agua, que es cortado por la ruta GR 19.1, que nos llevará de vuelta a Bielsa.
Esta ruta de poco más de 5 kilómetros discurre en su mayor parte por frondosos hayedos que cubren las faldas del Circo de Pineta. Si hacemos este recorrido al final del verano, veremos paisajes nevados de gran belleza. Tras alcanzar el valle de La Larri a través de una pista forestal que cruza el río Cinca, disfrutaremos de este valle glaciar colgado además de la cabecera del valle y la cara norte del Macizo del Monte Perdido. La ruta termina con el descenso para completar algo más de 5 kilómetros.
Caminaremos de Bielsa a Javierre por el antiguo camino de herradura que ahora es un PR. De allí a Parzán, podremos vislumbrar zonas de matorral y otras de arbolado, frondosas y coníferas. Desde el camino, veremos pinares de pino negro así como el barranco de San Miguel y el monte de Cuezo.
FONDO DEL VALLE DE PINETA
Un camino paralelo por la margen izquierda del río Cinca marca el comienzo de esta ruta. El extenso pinar de esta margen contrasta con los densos hayedos que hay en la derecha. Tras seguir la señalización del GR 11, habrá que cruzar el río por la zona que menos caudal tenga. A lo largo del cauce, destacan las superficies cubiertas por salgueras y mucha vegetación. Siguiendo por el GR 11, bordearemos una amplia zona de pastizal hasta llegar al aparcamiento de Pineta tras casi 6 kilómetros de recorrido.
Estas rutas demuestran que Bielsa y su valle son mucho más que carnaval. Son sinónimo de que Huesca tiene magia: la magia de la naturaleza.
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